Cuando Luisinana pasa a manos de la corona española, la población se subleva. El nuevo gobernador reprime con dureza a los insurrectos, y la bella Félicitè Lafargue, tras la detención de su padre y la huida de su hermano adoptivo, se queda sola y desposeída de todos sus bienes. Desesperada por la suerte de su padre, ruega clemencia al ayudante del gobernador, que accede a ayudarla a cambio de sus favores. Félicitè escapa de sus garras, pero ambos volverán a encontrarse en una exuberante isla del Caribe.
Es una novela muy bien documentada en cuanto a lo histórico que se mezcla y se mete en la vida misma de los protas. Es una novela llena de aventuras, intrigas, odios y se narra con una rapidez que permite que al lector vivir las aventuras que allí se cuentan. La prota es una chica dulce, pero no tonta, el problema es que se rinde con mucha facilidad. El prota es guapo y valiente, pero le falta un poco de ternura hacia la chica. Hubo un par de escenas que no me gustaron para nada, pero en general la novela está muy bien. Yo le doy 8.
No me convence mucho, me gusta que las protagonistas tengan mas personalidad y carácter.
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